jueves, 24 de mayo de 2012

Premio Mutante X3



Hoy he metido la mano en el fondo del baúl donde tengo los premios acumulados y he encontrados tres premios mutantes, dos de ellos otorgados en Febrero. Cada premio contiene 11 preguntas y esperan ser otorgados a otros once blogs. Como son tres, he decidido uninficarlos todos y escoger varias preguntas de cada blog. Los premios son de agradecimiento por la amistad y me consta que ya han sido otorgados anteriormente a casi todo mi entorno virtual, así que como es mutante he decidido darle yo otro giro y entregarlo a once blogs menos conocidos, a esos que están comenzando y les viene bien un chute de ¡ánimo, lo estás haciendo muy bien!.

Comienzo pues agradeciendo a los tres blogs que me premiaron:

Montse, Dácil, Bere, muchísimas gracias y disculpen por haber tenido mis premios guardados en el baúl todo este tiempo. ¡Besos a las tres!.

A continuación paso a responder a las preguntas, que además serán las mismas que me gustaría que respondieran los blogs premiados;

1. ¿Puedes elegir un/os momento/s mágico con tu niñ@?
Puedo elegir no uno, sino miles, millones. Los que mas se repiten son nuestras batallitas de cosquillas buscándonos y escondiéndonos por toda la casa. Definitivamente son momentos mágicos.

2. ¿Has viajado con tu hij@ a algún lugar?
Sí, a sus 21 meses mi hijo ya se ha hecho algunos viajes. Ya puede decir que ha estado en Fuerteventura, New York y Perú. Y con muy buenas experiencias, está visto que le encanta viajar como a sus papis.

3. ¿Cuál fue tu última travesura?
Mis travesuras son todas con el peque (y luego decimos que de dónde saca esas cosas). A veces hacemos equipo para buscar y hacer cosquillas a papi y otras veces se me revelan y acaban persiguiéndome a mí.

4.¿Cual es tu afición favorita?
Tengo varias pero la que mas practico es la lectura, bueno, y desde que tengo el blog la escritura. A ver si me ajusto con el tiempo para retomar la natación.

5.¿Cómo y cuando te diste cuenta de que te gustaba escribir?
Siempre lo he sabido pero creo que la llegada de mi hijo ha sido lo que me ha dado el empuje y la creatividad necesarios.

6.¿Cual es la cualidad que mas admiras de tu hijo?
Su optimismo, esa sonrisa perpetua y tan contagiosa.

7.¿Recuerdas cómo veías la maternidad antes de ser madre?
Ante todo lejana. Soy muy consciente de haber tenido a mi hijo cuando ya estaba preparada. Tenía planes y metas que conseguir antes de dar el salto.

8.¿Cual es el apodo que le dices a tu hijo?
Que conste que el apodo que le tenemos se remonta a cuando tendría sus dos semanas de nacido que fue cuando empezó con sus cólicos. De repente, de ser un bebé dormilón y tranquilo nos enseñó el Chucky que llevaba dentro. Desde entonces, cuando nos sale con alguna de las suyas (afortunadamente son pocas las veces) le llamamos chucky.

9.¿Qué tipo de música le gusta a tu hijo?
Partiendo de la base de que no es especialmente fan de la música "para niños", nos hemos dado cuenta de que le va la música movidita, la más cañera. Y las lentas solo le gustan si las baila con mami... ;) 

10.¿Playa o Montaña?
Playa, playa, playa!. Sin duda.

11.¿Defiendes la guardería o la crianza en casa?
Ambas según el caso y las circunstancias. Si eres una persona  lo suficientemente constante y capacitada como para tomar el reto en casa estoy contigo. Este tema tiene muchos matices y no me gusta verlo en su generalidad pues cada caso tiene sus propias circunstancias. Quizás lo que mas me preocupa es que sepamos identificar cuales son las necesidades reales de nuestros hijos y no solo las nuestras.

Ahora paso el testigo a once blogs:

¡Enhorabuena a los premiados!

lunes, 21 de mayo de 2012

Reseña: "Tatiana & Alexander"



Pocas veces sucede que varios libros de una misma trilogía o saga sean todos igual de buenos o incluso que se superen entre sí. Es el caso de este segundo libro, "Tatiana & Alexander", de la trilogía del "Jinete De Bronce" de Paullina Simons.

He quedado realmente impresionada con este segundo volumen, donde además de ser un trabajo mucho mas introspectivo desde el punto de vista de los personajes, lo ha sido también desde el punto de vista de la guerra, de las implicaciones de toda esa época de oscuridad y desasosiego. La autora nos da aquí toda una explicación del por qué de la guerra y de todos los desencadenantes y consecuencias que provoca en muchos aspectos. 

Tatiana y Alexander se ven separados por una cruel guerra y, por supuesto, por la resolución de la misma. De esta manera, la autora aprovecha para ahondar en el pasado, presente y futuro de los personajes haciendo un trabajo, en mi opinión, magistral. Nos ofrece una imagen mas que fiel de los resultados de la guerra, de la destrucción y la desolación que reinaba en Europa tras ella.

Ahonda en el comunismo, en la razón por la cual una familia estadounidense decide abandonar una vida cómoda en su país para abrazar sus convicciones políticas, para ir a vivir el comunismo de primera mano a su cuna, desde lo que creían su nacimiento y no era mas que el declive, con toda la ilusión de aquel que cree en un sistema mejor y eficiente para todos. Les dejo aquí el reflejo fiel de lo que allí encontraron:
"La llegada a Moscú, 1930. A los once años, Alexander entró con sus padres en una habitación pequeña y fría y sintió náuseas en cuanto traspasó el umbral.-¿Qué es ese olor, mamá?- preguntó. La habitación estaba a oscuras y Alexander no veía bien qué había en su interior. Cuando su padre encendió la luz, siguió sin ver apenas nada porque la bombilla estaba sucia y amarillenta. Alexander se tapó la nariz y volvió a preguntar qué era aquel olor. Su madre no dijo nada; se quitó el sombrerito y el abrigo, pero al sentir frío se los volvió a poner y encendió un cigarrillo. El padre de Alexander recorrió la habitación con pasos viriles, palpando la cómoda, la mesa de madera y los visillos polvorientos.-No está mal- concluyó-. Estaremos muy cómodos. Alexander, tú tendrás una habitación para tí solo y tu madre y yo nos quedaremos en ésta. Ven, voy a enseñarte tu dormitorio. Alexander le dio la mano y salió detrás de él. -Pero huele raro, papá...-No te preocupes.-Harold sonrió-. Tu madre lo limpiará todo. Además, no pasa nada. Es sólo que... aquí vivían muchas personas. -Oprimió la mano del niño-. Es el olor a comunismo, hijo. ...- Por favor, papá -insistió-, ¿qué olor es ése?. -Son los retretes, Alexander -respondió su padre, incómodo.- ¿Y dónde están? -preguntó Alexander, paseando la mirada por el dormitorio. -Aquí no. Están cerca, en el pasillo. -Harold sonrió-. Míralo por el lado bueno: no tendrás que ir muy lejos si te despiertas en medio de la noche.-Papá -dijo, respirando por la boca para contener las náuseas-. ¿No sabes que nunca me despierto en medio de la noche? Tengo un sueño muy profundo. En la habitación había un camastro cubierto por una mantita de lana. Cuando se fue Harold, Alexander se asomó a la ventana para ver qué había fuera. Hacía mucho frío en Moscú. Era diciembre y la temperatura era de varios grados bajo cero. Al asomarse a la calle desde el segundo piso, Alexander vio que en el suelo de uno de los portales dormían cinco personas. Dejó la ventana abierta. Hacía frío pero no le importaba. Prefería que se ventilara la habitación. Salió al pasillo pero no pudo entrar en el baño y optó por bajar a la calle. Al volver se desvistió y se metió en la cama. El día había sido largo y Alexander sólo tardó unos segundos en dormirse, pero tuvo tiempo de preguntarse si también existiría el olor a capitalismo."

Si por algo se caracteriza esta trilogía es por su intensidad. Intensidad en los personajes, en la historia y en los sentimientos.  Aquí les dejo una muestra de uno de esos momentos de desesperación y de cansancio. La hora mas negra de Tatiana:

"Tatiana miró la pistola que tenía en el regazo, con siete balas en la recámara, y pensó: Sólo se necesita una fracción de segundo, una milésima de segundo, para que todo acabe. Así de fácil".

Cerró los ojos. Qué alivio no tener que despertarse nunca mas. No tener que despertarse y pensar en él tendido sobre el hielo. Qué alivio no sentir este ahogo. No amar. No herir, ni desear, ni sentir pesar. Como si el pesar no fuera solo mi derecho, mi prerrogativa, mi privilegio, sino también mi castigo. Acaricio mi pesar como antes lo acariciaba a él; mientras siga fingiendo que vivo, puedo estar cerca de él. Lo he mantenido a raya durante casi tres años, guardado en la carreta de la desesperación. Ahora estoy desconsolada, dejadme en paz, dejadme contemplar mi pesar con toda mi pasión y todo mi ardor. Pensábamos que mi fuerza me permitiría superarlo, pensábamos que sería capaz de sobrevivir a esto. Pero nos equivocábamos. Al parecer, no consigo superar tu ausencia. Y sin embargo, es lo que más ansío... Qué alivio sentiría, qué placer, si no tuviera que vivir por los dos."
Realmente es una trilogía muy completa, los datos históricos y la documentación entretejidos con una excelente historia hacen de ella un resultado redondo. Redondo en sus conexiones y en su congruencia pues el resultado en sí dependerá de cómo cada persona viva su vida después de tan horribles experiencias. Son muchos los horrores vividos y la lucha no acaba cuando termina la guerra. Después de la guerra la lucha es contra uno mismo y los traumas adquiridos, contra las pérdidas que nos hacen sentir mas solos y contra los traumas y pérdidas de los demás que también siguieron viviendo...

jueves, 17 de mayo de 2012

Desvelados



Alrededor de las 2 de la madrugada del martes 15 de Mayo, el peque es trasladado (por mí) de su cuna a nuestra cama todo sudoroso y sofocado, plena ola de calor mediante. Ahora somos tres sudorosos y sofocados en la misma cama, bueno dos, papi duerme como un bendito y ni siente ni padece.

Más tarde, sobre las 2:30 a.m y después de un montón de vueltas con sus diferentes posturas, lleno de besos al peque y con palabras suaves lo animo a seguir durmiendo. Mami también se ha desvelado y no podrá dormir hasta que el peque se duerma, como mínimo.

2:35 a.m: Peque, ¿quieres agüita?. Espérame aquí que mami te va a traer agua ¿si?. Mami aprovecha para ir al baño y cuando está allí oye al peque (y medio barrio también): 
- ¡Papiiii! Mami....
- ¡¡Papiiiii!!
- Mmmmm... (papi parece escuchar algo, el resto del barrio ya debe estar despierto).
-¡¡Papi!! Mami, ¡¡agua!!
- Mmmmm... ¿¿eeeehhh??
- ¡Papi! Mami, agua ¡YEEEEEEEEEEEEEE!
- Mmmmm... sí, vamos a esperar a que venga mami con el agua ¿ok?, cierra los ojos mientras (¡ja! las lleva claras jajaja, buen intento anyway).
- ¡Mami! ¡Mami! ¡Yeeeeeeeeeeee!! ¡Agua!
Mami llega por fin con el agua bien fresquita, ella ya se ha bebido un vaso y lleva uno para el peque y otro para papi, 
-¡Agua! ¡Agua! ¡¡Mami!! ¡Yeeeeeeee!. (Un poco mas y me hace la ola, así sí vale la pena levantarse durante la noche).
El peque no para de hablar mientras se bebe su vasito de agua, papi se lo bebe muy lentamente, me sorprende y le explico que se lo he traído a él también porque hace muchísimo calor. A papi le invade un sentimiento parecido a la vergüenza y me doy cuenta de que comienza a destaparse poco a poco. ¡Estaba tapado con el edredón!. Para no hacerme sentir mal se bebe toda el agua... :O

2:50 a.m:  Ya fresquitos nos volvemos a acostar. Vamos peque, todos a dormir ya....
- Zzzzzzzzz Zzzzzzzzzzz.... (Papi ya está durmiendo.... hay que ver como se estresa este hombre...).

3:00 a.m: El peque y yo necesitamos ayuda externa, estamos demasiado despiertos. Espera peque, voy a traerte tu estrellita.
- ¡Tita! Yeeeeeeeeeeee!. (Vaya, que emoción, y eso que llevamos meses sin usarla...)
- ¡¡¡Papi!!!! ¡Titaaaa!! (¡Ay! alma de cántaro!)
- Zzzzzzzzzz Zzzzzzzzzzzz...
Vuelvo con la estrellita, es musical y con proyector, tiene tres melodías distintas, para nosotros dos porque la última no parece gustarnos mucho a ninguno. También puedes regular el tiempo, 5 y 10 minutos. En ocasiones como esta vendría bien la opción de los 30 minutos. Opto por la de los 10 minutos. Apenas lo enciendo:
- ¡Mami! ¡Oso!
- Si mi vida, es un oso. Bueno, mas bien es una osita, con antenas, pero una osita al fin y al cabo.
-¡Osita! ¡Osita, Mami!!
-¡Papi! ¡Osita!
- Zzzzzzzzzzz Zzzzzzzzzz...
La osita no se mueve, claro, la estrella lleva meses sin usarse y encima no estaba apagada así que el proyector no gira y se ha quedado estancado en la osita. Bueno, al menos suena y vemos a la dichosa osita...

3:15 a.m: Acaban los diez minutos, me pongo tensa en espera de que el peque se haya dormido. Dos respiraciones profundas y...
-¡Mami! ¡se acabó osita!. 
- Si, mi cielo, se acabó pero no te preocupes que mami la vuelve a poner otra vez.
-¡Papi! ¡Osita ota vez!
- Zzzzzzzzzz... Zzzzzzzzzzz... (que hijo tan ingenuo tengo, eso sí, es persistente, eso es bueno....)
Vuelvo a poner la estrellita, esta vez opto por la segunda melodía por aquello de tener algo de varidad...
El peque se emociona, me llena de besos y nos disponemos a ver la proyección estática en el techo. Ésta vez ya estamos mas relajados, puede que ya sea la definitiva...

3:25 a.m: Oigo su respiración profunda, acaba la música, vuelvo a ponerme tensa. Esta vez mi angelito se ha quedado dormido. Lo lleno de besos.

Ahora mami ya puede relajarse y dormir, ahora sí podré descansar. Mañana lo dejaré dormir un ratito mas, estará agotado... Qué raro es esto del sueño, siempre que se desvela le dura una hora y media, nunca se duerme antes... ¡Pero qué calor está haciendo!, quien fuera como papi que no se entera de nada, ni calor tiene (Zzzzzzzzzzzzzzzzz)... En cuanto me levante pongo una lavadora, el  otro uniforme debe estar limpio y seco a mediodía para llevárselo a la casa de la abuela para el miércoles, con este calor fijo que se seca rapidísimo, ¿qué hará el peque en la guardería para ensuciarse tanto?... ¡Ay! olvidé comprar las cebollas para el puré, mañana las compraré después de dejar al peque en la guardería... Tendré que aplazar lo de la ITV del coche, eso me va a tomar mucho mas tiempo... ¿Qué hora será ya?, ahora lo miro... Zzzzzzzzzzzz...