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jueves, 17 de enero de 2013

Te Quiero Mucho Mami


Nunca olvidaré la vez en que mi hijo dijo su primera palabra, en su caso fue "Mamá". Reconozco que no salió de la nada, todos le animábamos a decir mamá o papá indistintamente. Supongo que a base de tanta repetición al niño "solo" le quedó escoger cual diría. 

Con el tiempo la cosa cambia, entran muchos mas factores en juego, nuestros hijos van adquiriendo mas autonomía y son muchos mas los frentes que tenemos que abarcar para ayudarles en su aprendizaje. Pero ¿qué hay de los sentimientos?. ¿Qué pasa cuando ya no se trata de repetir una palabra sino de enseñarles a expresar un sentimiento?. Y aún mas, ¿cómo les enseñamos a "sentir" ciertos sentimientos?. Desde ya se los digo, el ejemplo es el mejor camino.

Hace algunas semanas llegaba de la guardería con el peque, de repente, ya en casa, me abrazó con mucha fuerza y me dijo: "¡Mi mami!". Era como si se alegrara muchísimo de verme, como si con esas palabras quisiese decirme todo lo que siente por mi y su apretón demostraba con su fuerza la cantidad inmensa de emoción que quería transmitir. Yo me quedé pensando en ello y por lo visto él también. Mas tarde, ya en su cama y listo para dormir, el peque me abrazó de nuevo con mucha fuerza y me dijo: "Te quiero mucho mami". Mi corazón lloró de alegría, qué inesperado y qué grandioso.

Tengo la satisfacción, el orgullo y la dicha de decir que desde entonces lo repite casi todos los días. Y he de reconocer que le he dado algunas vueltas al asunto. Yo nunca le expliqué expresamente lo que significaban esas palabras aunque sí se las hemos dicho constantemente mientras lo abrazábamos y lo besábamos (y lo seguimos haciendo claro). Me sorprende lo bien que ha entendido el mensaje y me maravilla porque eso significa que lo estamos haciendo bien, que hemos sabido transmitírselo, que es feliz y que nos quiere tanto como nosotros a él. Inmensamente.

martes, 3 de enero de 2012

El Pijama Más Calentito


Yo mentando a los Reyes Magos y van y aparecen. Y es que por lo visto este año se han anticipado y ya han pasado por casa. Esta noche, el peque ha dicho su primera "frase", bueno, ya saben, ha conectado varias palabras dándole un significado global, sin verbos. La alegría viene acompañada de algo de vergüenza por nuestra parte pues el pobrecillo, o hablaba o se asfixiaba.

Nunca hemos sido de esos padres superprotectores con el niño, no lo hemos abrigado en exceso ni nada de eso pero siempre hay una primera vez aunque sea inconsciente. Y es que en nuestro viaje, le trajimos al peque un pelele, calentito pensamos. He de decir que vivimos en una isla en la que por lo general no tenemos estaciones muy marcadas. "La isla de la eterna primavera" la llaman. 

Por esta época está haciendo algo de fresquito y como al peque le da por quitarse los calcetines y destaparse durante las noches, pensamos mi marido y yo que el pelele arriba expuesto (pues me he tomado la molestia de buscar el mismo modelo y todo, digo yo que para amortizarlo porque no creo que se lo volvamos a poner), sería de gran utilidad a la par que apropiado y muy a tono con estas fechas. 

Total que se lo pusimos hace dos noches y el peque no paraba de remangarse las mangas hasta los codos y si por él fuera, más arriba, pero salvo eso fue una noche normal. Pero anoche, cada vez que lo llevábamos a su cuarto a dormir se mostraba muy despierto y señalaba para fuera. Pensamos que estaba desvelado pero la cosa se empezó a poner color de hormiga a medida que pasaba el tiempo pues normalmente sobre las nueve y media ya está durmiendo y ayer nos dieron las once. 

Un poquito antes de las once volvimos a hacer el intento de llevarlo a su cuarto, lo tenía en mis brazos y empezó a hablar y yo lo cortaba y le decía que no eran horas de hablar sino de dormir (que vergüenza). Al final me dijo, "Mamá...", en este punto decidí seguir la conversación y le dije: "Qué...", a lo que él me respondió "Mamá, el nené...allá" y se señalaba a su pijama y luego hacia la sala. Pensé que lo que quería era dormir con nosotros y le dije que lo llevaba un rato a nuestra cama pero que luego tendría que irse a la suya. Una vez allí, él se remangaba las manguitas de nuevo y fue cuando lo entendí. Le cambiamos el pijama por un dos piezas y no le pusimos los calcetines. ¡Dios mío! qué felicidad. Se frotaba sus pies, se los cogía con las manos y finalmente se quedó dormido frotando uno de sus pies contra la cama con una sonrisa (otra vez, qué vergüenza), todo esto en dos minutos (lo de mi vergüenza está durando bastante mas).

Después de asumir lo que había pasado me dio por leer la etiqueta del pijama. Tengo que decir, por cierto, que nuestro peque, para haber nacido en pleno agosto nunca ha tolerado demasiado el calor, enseguida se acalora y pide estar fresquito. Pues bien, un poco gruesito si que es el pelele y por lo demás nada fuera de lo normal, salvo algo que me llamó la atención; entre otras cosas decía "Flame Resistant" (Resistente al fuego). ¿Qué demonios significa eso?¿que si se incendia el peque ahí dentro el pijama sobrevive?¿que si hay un incendio en casa lo único que se salvará será el pijama?.

Mi hijo es un fan confeso y evidente de los camiones de bomberos pero está claro que este tipo de uniforme le haría desistir de tal vocación.